Desesperación



Desesperado estoy
en el más profundo de mis lechos,
contando los amores defraudados
y los deseos equivocados.

Pienso en ti,
mi dulce amada,
compañera de mis perversiones.
Pero no logro
quitarme esta capa
de degeneración contaminada.

Pienso en ti y
desesperado de mí
cuento.
Cuento
los días sin luz,
las notas no escritas,
todo lo olvidado.

Desespero pensando en ti,
pero cuando acabo
no estoy tan vivo
como muerto,
tan acabado
como sublimado.

Desesperadamente
acabo en tu lecho,
en tu bienestar,
en tu infierno,
en tu intervalo
de ahogado aliento...

... pero pienso en ti.



1 comentario:

Anónimo dijo...

¿porqué llamarlo amor, cuando quiero decir sexo?